Inician trámite para reconocer ecosistema del Salar del Carmen como Humedal Urbano de Antofagasta
En el marco del Plan Nacional de Protección de Humedales 2018-2022, la Secretaría Regional del Medio Ambiente de Antofagasta, inició los trámites que buscan el reconocimiento oficial del humedal “Salar del Carmen”, bajo la Ley 21.202 que asegura la protección y declaración de humedales que se encuentren total o parcialmente dentro del límite urbano.
Así lo informó el seremi de Medio Ambiente, Gonzalo Bravo, quien precisó que “en tal sentido, hemos enviado a la División de Recursos Naturales y Biodiversidad del Ministerio del Medio Ambiente la ficha técnica descriptiva, a través de la cual solicitamos reconocer a este ecosistema como Humedal Urbano. El Reglamento de la Ley 21.202 establece, por primera vez, criterios mínimos para la sustentabilidad de humedales urbanos y con ello, el resguardo efectivo de los beneficios que estos ecosistemas entregan a las ciudades, como áreas verdes, espacios para la recreación, ecoturismo, control de inundaciones, mitigación del cambio climático, entre otros”
El humedal “Salar del Carmen”, conocido también como “kilómetro 12”, está ubicado en el sector noroeste del salar del Carmen y se formó producto del descarte de las aguas de desecho de la planta de filtros de la empresa Aguas Antofagasta. Los lodos provenientes del proceso de potabilización fueron descargados por muchos años, desarrollándose una extensa vegetación compuesta principalmente por junquillos, colas de zorro, chilcas y breas, generando con ello un hábitat para especies animales, particularmente reptiles, aves y mamíferos.
Entre las especies de vertebrados que es posible apreciar en el sector destacan, el reptil corredor de Tarapacá (Microlophus tarapacensis) que utiliza el perímetro de la vegetación para alimentación y descanso. Además se pueden observar el chercán (Troglodytes aedon), tijeral (Leptasthenura aegithaloides), el picaflor del norte (Rhodopis vesper), la paloma de alas blancas (Zenaida meloda), el aguilucho (Geranoaetus polyosoma), el cernícalo (Falco sparverius) y el halcón peregrino (Falco peregrinus), entre otras aves.
Según precisa la ficha técnica descriptiva, que ha sido trabajada con el apoyo de la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de Antofagasta y de Fundación Kennedy, uno de los principales servicios ecosistémicos que provee este humedal es el de recreación, en particular como área de relevancia para la observación de fauna, y en específico de aves.
Se trata de un ecosistema único en medio de un paisaje desértico y su cercanía a la ciudad y a actividades antrópicas, ocasionan que esté sometido a una serie de presiones que constituyen amenazas, entre ellas: descargas de aguas servidas; crecimiento industrial; presencia de especies exóticas invasoras y residuos, de allí su importancia de poder protegerlo bajo la figura de Humedal Urbano.
El procedimiento de reconocimiento de estos ecosistemas, permite la recepción de solicitudes de declaración de humedales urbanos por parte de municipios y el reconocimiento de humedales de oficio por parte del MMA, acción que marca un esfuerzo conjunto entre ambas entidades, Ministerio y Municipios en la protección de los humedales en las ciudades, para beneficio del medio ambiente, pero sobre todo para las personas que ahí habitan.
La autoridad ambiental destacó que desde la Secretaría Regional del Medio Ambiente se está impulsando el reconocimiento oficial de otros humedales, sean estos naturales o artificiales, “porque necesitamos resguardar estos ecosistema de acciones antrópicas. Es importante precisar que esta Ley tiene por objeto asegurar que proyectos que impliquen alteración de un humedal urbano deben someterse al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (proyectos o actividades susceptibles de generar impactos ambientales en humedales urbanos). Además, se reforma la Ley General de Urbanismo y Construcciones para efectos de incluir a los humedales urbanos en los instrumentos de planificación territorial en todas sus escalas”, puntualizó